La tradición vitivinícola en la región de Évora se remonta a tiempos inmemoriales. La Carta que D. Manuel I otorgó a la ciudad en 1501, que así lo atestigua. Los vinos tintos se queman a partir de las variedades de uva Trincadeira, Alicante Bouschet y Aragonez, envejecidos en barricas nuevas de roble francés. Muy frutal, mostrando gran concentración y exuberancia de juventud.